Que inocente y que temido, ser tu dios y a veces no, ser tormento de este juego, quizás me quieres, pero a tu manera, quizás te amo, pero a la mía.
¿Soy el peón de tu partida? Tú el rey de la mía;
¿Tú manejas la jugada? Yo aun conservo mi casilla;
¿Quién se come a quien? …
Que angustioso sentimiento el que recorre mis adentros, que a veces pienso que te quiero, y a veces pienso que te odio.
Que locura la de este juego, por mas que busco la VICTORIA, solo encuentro la derrota, pero si te digo, que por mas daño ofrecido, mas deseo con delirio, si te digo que aunque el tiempo haya pasado, aun te guardo con cariño, no te miento, solo digo que aun te siento.